Te tiene que tocar de cerca para que entiendas la desesperación e impotencia y por otra parte las ganas de probar y agarrarte a un clavo ardiendo para poder entender a una familia, como la de Ashya King, que quiere salvar a su hijo de una enfermedad importante.
El pequeño se encontraba en el Hospital General de Southampton donde le habían diagnosticado un cáncer cerebral con pocas esperanzas de vida.
Los padres de Ashya King, quienes no estaban dispuestos a tirar la toalla así como así, decidieron sacarlo del hospital sin permiso para llevarlo a España y buscar un tratamiento alternativo.
En nuestro país, lejos de recibirles con los brazos abiertos, recibieron gracias a la orden de las autoridades británicas una bienvenida con un encarcelamiento en la prisión de Soto del Real quedando después en libertad tras una decisión de la Audiencia Nacional. El pasado mes de septiembre Ashya ingresaba en una clínica de Praga para recibir un tratamiento de radiación con protones que ha dado resultado y le ha curado del cáncer cerebral que padecía, sin quedar rastos del tumor después de someterse a una exploración médica.
El tratamiento con terapia de haz de protones únicamente se puede recibir en el Proton Therapy Center (PTC) de Praga en toda Europa Central y del Este.
El centro PTC asegura que esta terapia es más efectiva que la radioterapia y que además reduce el daño que provoca a veces la radiación en órganos vitales como pueden ser el corazón o el hígado.
En España el pequeño Aysha de 5 años ya puede jugar en un parque de Marbella junto a sus hermanos siendo el doctor argentino Hernán Cortés-Funes, jefe del servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid y de la Unidad de Oncología del Hospital Internacional HC Marbella, el encargado de velar por su salud.
¿Hasta donde llegaríais vosotros?
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