Soy consciente de que, en algunos hogares, donde el consumo de bollería se ha visto como normal, puede que no se le dé la importancia que requiere el hecho de comprar este tipo de alimento y sobre todo, de ofrecérselo a los y las peques.
Como os he comentado en otras ocasiones, en nuestro caso fue a raíz de ser padres cuando los hábitos alimenticios empezaron a cambiar para mejorar y preservar nuestra salud y la de nuestra retoñita que ya tiene 7 años.
Así que hace 7 años que el caldo de pollo y pavo con verduras se hace en casa, las lentejas se comen una vez por semana y el puré de calabacín es bienvenido si se acompaña de unos ricos picatostes.
Hace 7 años que dejamos de consumir bollería, de cenar pizza día sí, día también o pasta o bikini…intentando disminuir el consumo de carne y pasta para alternarlo con el de verdura, legumbres y pescado.
El consumo de la bollería en el hogar
El otro día pensaba acerca de lo “normalizado” que está en nuestra sociedad el hecho de comprar y consumir bollería o productos industriales. Si miramos nuestras despensas…¿Cuántos paquetes de plástico tenemos? Si analizamos nuestras comidas y cenas…¿Cuántas de ellas contienen productos realmente caseros, sin conservantes, colorantes o glutamato monosódico?
Es cierto que cocinar alimentos de forma artesanal en casa conlleva tiempo pero a veces no es tanto como parece. Si disponéis de robot de cocina deberíais volver a echarle un vistazo al recetario porque hay postres caseros como el arroz con leche que no necesitan más que echar los ingredientes y esperar. (por cierto si tenéis la Mycook debéis poner 60 min en lugar de 45′ para que quede el arroz tierno).
Leo notícias como la que analiza los ingredientes de un bollito tipo industrial y confirmo que son verdaderas “bombas” contra nuestra salud y la del que lo consuma, ya que su contenido es básicamente azúcar, harina refinada con grasa y aditivos varios. Mmmmm…¡Donde va a parar un arroz con leche cuyo contenido sea arroz, leche, azúcar moreno o miel, canela y ralladura de limón!
No hay color…¿No os parece?
