DIFERENCIAS ENTRE PARTO HUMANO Y PARTO ANIMAL

El día 5 de Octubre se lee en el ABC de Sevilla, concretamente en el apartado de Ciencia, una publicación cuyo título me llamó la atención: ¿POR QUÉ ES TAN DOLOROSO EL PARTO HUMANO?

Dentro del artículo se publicita un libro recién estrenado del paleontólogo Juan Luis Arsuaga llamado “el primer viaje de nuestra vida”, en el que se centra en explicar porqué el parto humano es tan diferente al del resto de especies animales, por qué es más difícil y doloroso, y la relación que hay entre ello y la inteligencia que nos

caracteriza con respecto a los demás mamíferos. Además se muestra un video en el enlace con imágenes explicitas del canal del parto de los humanos con relación a vacas, jirafas y otros animales.

 

Algunas de las razones que comenta Juan Luis del porqué de el parto tan laborioso en nosotros, es la propia evolución. La mujer, a diferencia de otras especies, tenemos la vagina orientada hacia delante, por la bipedestación, que también implica una posición de la pelvis, que hace que las crías nazcan “prematuras” con respecto al resto de mamíferos en los que nacen y en pocas horas son maduros para realizar ciertas acciones.

 

En todos los otros mamíferos el llamado canal de parto es muy breve, en cambio en las hembras humanas es muy prolongado y sinuoso, esto hace dificultosos los nacimientos. Además al acercar las piernas para poder andar, se produce un claro estrechamiento de la pelvis, que también hace que parir sea una tarea más dificultosa.

Por otro lado el paleontólogo comenta que hay otra razón contundente, y es el aumento del tamaño de la cabeza de nuestros bebés en comparación con otras crías de mamíferos “Nuestro feto tiene un cerebro al nacer que es como el de un chimpancé adulto” por tanto tiene que salir al exterior antes de encontrarse maduro para vivir por sí solo, porque sino el tamaño sería tan grande que no podría nacer. Aún así la evolución ha hecho que este bebé  nazca en un entorno favorable en el que le cuidan y protegen sus padres y las personas de su entorno, hasta que alcanza la madurez necesaria para ser autónomo en las acciones de la vida diaria.

Y ahora bien, a pesar de estar de acuerdo en toda la parte de la evolución del ser humano y en cómo dificulta esto el nacimiento, con respecto al resto de animales mamíferos, en algún momento nombran al parto humano tan difícil que en ocasiones parece una enfermedad, y no estoy de acuerdo con ello. En la práctica diaria las matronas que trabajamos en hospital vemos al orden de unos 15 partos por día, y en ninguna ocasión pensamos que trabajemos con la enfermedad, al contrario, el nacimiento se trata de un proceso fisiológico y natural con resultados, en la mayoría de los casos, positivos, y si bien es diferente al nacimiento de otros mamíferos, eso no quiere decir que sea algo tan traumático. Los partos pueden vivirse de muchas formas dependiendo de las circunstancias que rodeen al hecho. Hay dilataciones más complicadas, mujeres que llegan al hospital prácticamente pariendo, otras que perciben las contracciones muy dolorosas desde el principio, algunas que se preparan psicológicamente muy bien durante los 9 meses y pasan por la experiencia de forma muy adecuada, y multitud de situaciones diferentes más se viven todos los días en todos los hospitales. Por tanto creo que no hay que generalizar, cada embarazo y cada parto es diferente en sí, y si fuera algo tan traumático para todas las mujeres, ¿no nos hubiéramos extinguido ya?

Os dejo los enlaces para que podáis ver el tema y opinar vosotras mismas.

http://www.abcdesevilla.es/20121005/ciencia/abci-doloroso-parto-humano-201210041827.html

http://www.abcdesevilla.es/20120924/ciencia/abci-juan-luis-arsuaga-parto-201209240936.html

 

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5 respuestas a DIFERENCIAS ENTRE PARTO HUMANO Y PARTO ANIMAL

  1. avatar Gloria dijo:

    Sin ánimo de restarle importancia ni valor al trabajo realizado por el paleontólogo Juan Luis Arsuaga, estoy totalmente de acuerdo contigo, Alba. No se puede generalizar, cada parto es distinto. Tampoco debemos considerar el parto como una enfermedad, creo que ni siquiera son comparables.

    No soy médico o matrona, ni mucho menos paleontóloga. Pero he parido dos veces. Cada uno de mis partos ha sido una experiencia totalmente distinta, en todos los aspectos. En ninguno de ellos me consideré una “enferma”.

    Mi primer parto fue muy largo y doloroso, tanto que pedía a gritos “¡háganme una cesárea, por favor!”. Largas horas esperando una dilatación que no llegó a ser suficiente, sufriendo todas las contracciones para acabar, al final, con una episiotomía enorme y muchos puntos. Al hecho de ser primeriza e inexperta, se sumó que era muy joven e ignorante, pues no me había preparado para el parto ni física ni mentalmente, estaba muy asustada, nerviosa, angustiada…

    Mi segundo parto, en cambio, fue distinto. Era mayor y más consciente de la experiencia que podía vivir si yo hacía todo lo posible por ayudarme a parir. Asistí a clases de preparación para el parto. Cuando comenzaron las contracciones no me asusté ni salí corriendo hacia la maternidad, hice lo posible por relajarme respirando bien, paseando entre las contracciones, tal y como me había enseñado mi matrona. Cuando sentí que el momento se acercaba, llegué a la maternidad y ¡tuve un parto de veinte minutos! Sin desgarro alguno, ni puntos ni cicatrices, incluso mi matrona se asombró de la rapidez y facilidad con que todo había concluido.

    Yo era la misma persona, lo que había hecho mi segundo parto más fácil fue la preparación para ese momento. No es que no sintiera el mismo dolor, el dolor era el mismo, pero había cambiado mi actitud frente al dolor, me sentía mucho más preparada y tranquila, paseaba, respiraba. De esa forma, cuando llegué al paritorio lo peor había pasado de la mejor forma posible, ya sólo me quedaba la fase final, de la que disfruté plenamente.

    Por eso creo que parir no es una experiencia traumática. “Parirás con dolor”, eso dicen y es cierto. Nadie duda que parir duela. Pero, a diferencia de las enfermedades o los traumatismos, a la hora de parir gran parte del resultado depende de nosotras mismas, de cómo nos hayamos preparado para ese momento y de que seamos capaces de mantener el control de la situación. Tener un hijo es como una carrera de fondo, si no te entrenas bien durante el embarazo, llegarás al parto angustiada y acabarás estresada y extenuada, sin fuerzas para vivir ese momento como se merece.

    El señor Arsuaga dice “El parto humano es complicado, doloroso y traumático, casi una enfermedad. Podría parecer incluso un fracaso de la evolución”. Afortunadamente, parir como parimos no es un fracaso de la evolución. A pesar de que pueda ser complicado y doloroso, nuestra mente ha evolucionado también y nos permite tomar el control en situaciones difíciles y en circunstancias mucho peores que un parto. De no ser así, ni habríamos salido de las cavernas ni habríamos llegado a ser lo que somos.

    Tienes razón, Alba, si no tuviéramos el poder de sobrellevar nuestros partos, hace tiempo que nos habríamos extinguido.

    Saludos y enhorabuena por este blog tan interesante.

    • avatar Alba dijo:

      Ante todo muchas gracias por tu comentario Gloria, estoy totalmente de acuerdo con lo dicho. Lo más importante a la hora de enfrentarse al parto, y a los días que lo rodean, es estar preparada tanto física ,como psicologicamente.Si la mujer durante los 9 meses va asimilando la situación y entrenando respiraciones, maneras de empujar y relajaciones, está asegurado que pasará un día mucho más satisfactorio. No cabe duda que el ser muy joven en el primer embarazo también puede ser un factor que dificulte la adaptación a la maternidad en sí, en el paritorio aparecen muchas sensaciones de inseguridad ante lo que viene, de cómo será todo al llegar a casa con el nuevo miembro en la familia, y en qué aspectos cambiará tu vida. Las mujeres que repiten y pasan de nuevo por la experiencia de ser mamás siempre lo comentan, ” ahora es otra cosa” además de que, en general, el propio cuerpo te ayuda a pasar más rápido la experiencia, tu ya tienes más control sobre la situación y sabes cómo manejarte.

      En resumen podría decirte que lo más importante es hablar, comentar tus dudas, ponerlas en la mesa junto a otras embarazadas, tu matrona o tu ginecólogo, aprender, adaptarte y disfrutar, tanto de tu embarazo, como del día del nacimiento. Siempre recordarás mejor esa experiencia si mantuviste el control y fuiste consciente de lo que iba ocurriendo.

      Me alegro mucho de que hayas compartido con nosotros los nacimientos de tus hijos, sirven para reflejar una de las múltiples experiencias relacionadas con la maternidad y estoy segura que gustará a los lectores del blog. Muchas gracias Gloria

      Un Saludo.

      Alba.

  2. avatar Auri dijo:

    Yo tuve un parto múltiple, y mi miedo no era el dar a luz, sino el que me pusiera de parto y estuviera sola en ese momento.Tenía una revisión en el hospital, y me dijeron que me tenía que quedar ingresada, que estaba de parto, y llevaba tres centímetros de dilatación.
    Esto fué a las 10:30 de la mañana y a las 12:45 estaba naciendo mi primer bebe, y a los dos minutos el segundo. Quiero decir que mi parto fué maravilloso, dolores los justos, pero aguantables. Creo que Gloria y Alba tienen razón,que cada embarazo y parto son un mundo. Pero animo a las mamas a que no tengan miedo al parto,por que todo está en nuestra cabeza.
    Un saludo

  3. avatar Belen dijo:

    Yo creo que debemos tener en cuenta que los seres humanos somos mamíferos y por tanto nuestras necesidades a la hora de dar a luz son básicamente las mismas que las de cualquier otro animal mamífero, esto es: seguridad, intimidad, tranquilidad y confort. Para que el parto transcurra con normalidad la mujer necesita sentirse cómoda físicamente, en un ambiente oscuro y silencioso, rodeada de pocas personas conocidas por ella, en las que confíe y que no interfieran en el proceso innecesariamente si no que la dejen a ella y a su cuerpo, hacer el trabajo de parto a su ritmo. Muchos animos a las que esperais bebes, buscad el parto que quereis. Y besitos para esa maravillosa matrona Alba.

    • avatar Alba dijo:

      Auri no había visto tu comentario, lo siento. Por lo que has contado tuviste una muy buena experiencia, y fue un parto múltiple, que de por sí, conlleva otras medidas y tiempos. Me alegro que vivieras así de positivo ese día. Mucha parte de ello seguro que también fue por la actitud que tú tomaste para enfrentarte a ello.
      Y con respecto al comentario de Belén, no puedo estar más de acuerdo, nuestro instinto primitivo debe estar presente en algunos momentos del parto, o que, por lo menos, lo dejen fluir espontáneamente. La oscuridad en el paritorio, o la luz tenue, hacen que la mujer esté mas relajada, ya que las luces de los focos del techo son intensa, y ¡estimulan a cualquiera!. Un ambiente relajado, en el que te sientas segura, es lo principal para vivir una buena experiencia el día de tu parto, incluso aunque se viva alguna complicación, si sientes confianza con el lugar en el que te encuentras y los profesionales que tienes al lado, siempre se vivirá mejor lo que ocurra.
      También he visto con el tiempo, que las maneras diferentes de enfrentarse al parto, además de depender de la educación maternal que hayas recibido, o de las medidas de relajación o propia personalidad de la mujer, también dependen de la cultura de la que provengas. Hay razas o etnias que enfrentan el parto de maneras muy diferentes a las que la hacemos habitualmente las mujeres españolas. No paro de sorprenderme con los rituales, bailes, o cantos que se pueden escuchar muchas veces en nuestros paritorios provenientes de mujeres de otras culturas. El dolor y el miedo son universales, pero las medidas para enfrentarlos, son muy diferentes en cada lugar del mundo.

      Saludos,

      Alba.

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