El instinto maternal no es sólo las ganas de ser madre. No es sólo la decisión de quedarte embarazada para tener un bebé en casa. Yo creo que el instinto maternal son muchas más cosas.
Es esa pequeña alarma que te despierta cuando tu hija está a punto de caerse de la cama o de quemarse con el radiador, es la fuerza que te permite seguir durante tanto tiempo el día a día sin dormir decentemente, es la señal que te hace sentir que tu bebé se ha despertado antes de que lo escuches por el vigilabebé, son los reflejos que evitan que se caiga al suelo, el sentimiento de que está a punto de resfriarse para darle defensas… Son muchas cosas. El instinto maternal, es caer en que puede ser la muela lo que le está molestando y pedir más comprensión a los familiares, es atar cabos y escuchar para poder diagnosticar mejor que ningún médico si lo que tiene es dolor de oído o dolor de barriga…Es adecuar la dieta cuando estudias que cada vez que cena lácteo duerme peor e incluso tiene pesadillas porque no le sientan bien de noche…
He leído casos de madres que por no hacer caso a las recomendaciones de no llevar a su bebé en portabebés tipo manduca o bandolera le han salvado la vida porque la pequeña sufría ataques al corazón y sólo el contacto con la madre calmaban el dolor y el llanto.
He leído casos de madres que por masajear y hablar al bebé al que daban por muerto ha conseguido darle vida ante los ojos incrédulos del médico.
El último caso que conozco es el de una madre que sintió que algo no iba bien y después de insistir en que le hicieran pruebas a su hija resultó que tenía la enfermedad de Lupus, una enfermedad que ataca el sistema inmunológico y afecta órganos como los riñones o la piel o la sangre.
No sé cómo explicarlo. Pero sé lo que es el instinto maternal. ¿Tú lo has notado alguna vez?
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