Es un hecho que en muchos hogares, no nos damos cuenta de lo molestas que pueden llegar a ser las llamadas publicitarias, aunque no sean recibidas a altas horas de la noche. Aunque no sólo las llamadas molesten, porque también lo hagan los portazos de los vecinos o los tacones de la vecina del piso de arriba…hay ruidos con los que tendremos que lidiar, aunque nuestro bebé se haya despertado doscientas veces durante la noche y queramos aprovechar su siesta matutina para ducharnos y ser personas… 
El problema es que cuando tienes un bebé en casa, lo que necesitas es silencio y a veces, no es posible debido a las continuas llamadas publicitarias.
En mi caso, desde que tuve al pequeño, directamente tengo el móvil en silencio. Pero en el caso del teléfono fijo de casa no puedo ponerlo en silencio también ya que me quedo incomunicada en caso de que alguien necesite alguna urgencia…así que después de recibir un montón de llamadas impertinentes decidí ponerme manos a la obra y hacer algo para evitar la llamadas publicitarias.
¿Conocéis la lista de Robinson?
El servicio de la lista de Robinson permite, al darte de alta de forma gratuita a través de Internet o por teléfono, reducir la recepción de comunicaciones comerciales ya que puedes solicitar que determinada empresa te dé de baja de sus listas comerciales.
El único problema es que el plazo desde que haces la petición y comunicas que no quieres recibir publicidad ni comunicaciones comerciales de determinada empresa, hasta que se hace efectivo, pueden llegar a tardar hasta tres meses.
Este servicio de exclusión publicitaria es gratuito y sigue las directrices de la Directiva 95/46/CE para el correcto progreso de la actividad económica y para que los consumidores seamos un poco críticos y podamos escoger el tipo de publicidad que queremos recibir.
¿Conocías este servicio?
