En un artículo anterior, os hablaba sobre la postura o posición anterior para el nacimiento del bebé. Sin embargo, en ocasiones no siempre se da ésa, que puede decirse que es la más adecuada y la que puede garantizar un parto más sencillo, sino que, en ocasiones, el pequeño adopta otra posición.
Así, hay una variante de la postura cefálica anterior y se trata de la posterior.
En este caso, aunque el bebé también está hacia abajo, como en la anterior, la parte trasera de su cabeza estará oprimiendo tu columna vertebral. Aun así, esto no implica que el bebé no pueda nacer vaginalmente sino que quizás puede que sea más complicado para la futura mamá. Y es que, con frecuencia, cuando el pequeño se coloca así puedes sentir dolor de espalda porque su cabeza está contra tu columna, también puede que se ralentice el parto e incluso sentirás necesidad de pujar pero con el incoveniente de que aún no estés del todo dilatada, por lo que no será tan sencillo.
Además, una vez que llegue a la pelvis, el pequeño tendrá que voltearse aproximadamente unos 180 grados, ya que, será así cuando adopte la posición ideal para salir al exterior. Es por ello que suele alargarse el parto porque esto puede tardar e incluso a veces es necesario recurrir al uso de fórceps o ventosas para ayudarle al pequeño a salir.
Los motivos de que el pequeño adopte esta posición pueden ser variados. Con frecuencia se debe al tamaño o forma de tu pelvis, ya que, si no tienes una pelvis más o menos redondeada puede que le cueste acomodarse correctamente. Es decir, si tu pelvis tiene forma como de corazón, buscará el modo de estar mejor y puede que acabe apoyando su espalda contra la tuya.
Asimismo, si pasas mucho tiempo sentada, ya sea en el trabajo o en casa, también habrá más posibilidades de que se posicione de este modo, puesto que la pelvis se coloca hacia atrás. Sin embargo, si practicas deporte o algún tipo de ejercicio será probable que se ponga en la posición adecuada, en la cefálica anterior, ya que, con estos movimientos tu pelvis se colocará hacia delante, favoreciendo de este modo que tu bebé se coloque en la postura que deseas.
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