Todos los padres queremos lo mejor para nuestros hijos y una de las cosas que debemos hacer todos y cada uno de nosotros es proteger a nuestros pequeños y enseñarles a qué hacer en los diferentes contextos para que, una vez que crezcan, puedan defenderse ellos solos en este mundo tan diverso. Pero cuando hablo de proteger, no hay que sobreproteger, y es que la línea que separa una cosa de la otra, es bastante delgada.
Si eres un padre que sobreprotege a tus hijos estarás consiguiendo todo lo contrario a lo que realmente necesitan tus pequeños; estarás creando niños dependientes e inseguros. Unos niños que no sabrán hacer las cosas por sí mismos, que necesitarán al otro para todo y de esta manera no podrán ser felices, porque necesitarán del otro para que les hagan felices.
Hay cosas que se deben hacer en la educación de los hijos desde que son bien pequeños para que puedan empezar a tener sus propias decisiones sin necesidad de que seas tú quien decida todo por ellos (algo que hará que su autoestima quede tocada).
Deja que decida por sí mismo
Tendrás que dejar que decida por sí mismo acorde a su edad. Por ejemplo a un niño de dos años no le dejarás decidir qué comida debe comer porque obviamente te dirá aquello que más le gusta, pero sí puedes dejarle elegir los zapatos que quiere ponerse para salir a la calle… aunque a ti no te gusten.
Cuando son más mayores es importante que les dejes participar en las conversaciones de las reuniones familiares para que vean que a ellos también se les escucha y se respeta su opinión, aunque no estés de acuerdo.
Deja que tenga consecuencias naturales
Si tu hijo no quiere hacer los deberes explícale lo importante que es hacerlo y qué ocurrirá si no lo hace (pero, ¡nunca se los hagas para ahorrarle trabajo! Si crees que está cansado es mejor que lo deje sin hacer y que la próxima vez se organice mejor), si decide no hacerlo tendrá las consecuencias pertinentes (menos tiempo de salir con los amigos y la mala nota en la escuela).
Si tu hijo no quiere ducharse, no le obligues (¡no caigas en las luchas de poder!), le explicas que los demás se apartarán de él porque nadie quiere oler a alguien que huele mal y déjale que lo averigüe por sí solo. No obligues a tus hijos a que hagan cosas que no quieren, simplemente, explícale qué ocurrirá y déjale que decida qué es mejor.
Si encuentras interesante esta información, compártela con otros padres a través de tu Red Social Favorita Facebook, Twitter, Google +… Gracias 